- Economía Unicaja Banco será a partir de ahora solo Unicaja
- Banca Unicaja gana un 4% menos en 2023 pero sus acciones se disparan tras anunciar nuevo dividendo
Es el quinto banco de España por volumen de activos y la más importante entidad financiera con sede en Andalucía. Y este viernes ha cerrado definitivamente el proceso de renovación de su cúpula para superar una convulsa etapa de cambios, en un contexto de inestabilidad económica, que han lastrado su crecimiento en el último año. La junta general ordinaria de accionistas de Unicaja ha dado luz verde a la elección como consejero independiente de José Sevilla, paso previo a su toma de posesión como presidente no ejecutivo de la entidad en sustitución de Manuel Azuaga, que se ha despedido reconociendo las dificultades de los últimos tiempos: "No ha sido una labor sencilla".
Con estos cambios, el banco, que ha actualizado recientemente su imagen y simplificado su identidad corporativa (ha dejado de llamarse Unicaja Banco), espera haber dado pasos firmes hacia un despegue definitivo tras las turbulencias derivadas de la fusión con Liberbank.
Junto a José Sevilla, que aporta su experiencia del pasado en la reconversión de Bankia, el timón de Unicaja estará en manos de Isidro Rubiales, nombrado consejero delegado el pasado mes de septiembre.
La renovación de la dirección de la entidad deberá ir acompañada de una actualización de su modelo de negocio para mejorar su rentabilidad sin renunciar a su "herencia genética" (en palabras de Manuel Azuaga), que pasa por la rentabilidad, la sostenibilidad, la competitividad pero, sobre todo, "un perfil de riesgo bajo".
Para ello, Isidro Rubiales ha detallado el contenido de un plan estratégico que pasa por mejorar la eficiencia a través de la "excelencia operativa"; la gestión avanzada del riesgo con un "perfil conservador"; la mejora y el aumento de las capacidades de la banca digital; y la "apuesta por la sostenibilidad" en todas las líneas de negocio.
La junta de accionistas ha dado, por otro lado, el visto bueno al pago de 132 millones de euros en dividendos, lo que se traduce en un beneficio bruto por acción de 4,97 céntimos, un 2,7% superior al ejercicio anterior. La previsión es abonar los pagos el próximo 19 de abril.
Además, el consejero delegado ha explicado la puesta en marcha de un programa de recompra de acciones, que ya se encuentra en curso tras haber obtenido la aprobación del Banco Central Europeo, por un importe máximo de 100 millones de euros, con un máximo del 3,8% del capital social. "La ejecución de este programa redundará en una mejora de todas las métricas por acción, incluyendo un crecimiento del dividendo por acción que todos ustedes recibirán a futuro", ha explicado Rubiales.
La principal apuesta de negocio de Unicaja sigue estando vinculada a las operaciones hipotecarias, que suponen el 60% de la cartera crediticia. Estas, junto a las relacionadas con el sector público, constituyen el 72,3% del total, lo que confiere a la entidad un nivel bajo de riesgo, como ha remarcado el consejero delegado.
Al cierre de 2023, los depósitos en balance de clientes minoristas del sector privado alcanzaron los 62.284 millones de euros, tras registrar un crecimiento del 1,9% en último trimestre, invirtiendo la tendencia de trimestres previos, ha explicado Rubiales. "Su estabilidad y granularidad, dado que el 75% del total pertenece a personas físicas, con una baja concentración e importe medio en torno a los 20.000 euros, permiten aportar valor a nuestro modelo de banca comercial minorista y nos proporciona una ventaja competitiva en un escenario de tipos de interés más normalizados", ha añadido.
El Grupo Unicaja Banco obtuvo en 2023 un beneficio neto de 267 millones de euros, lo que supone una reducción del 4% en comparación anual, aunque excluyendo el impacto del nuevo gravamen a la banca, que se pagó por primera vez en este ejercicio, por importe de 63,8 millones de euros, el resultado hubiera ascendido a 330 millones de euros, un 19% superior al de 2022.
Estos resultados también se ven impactados por el importante esfuerzo realizado en materia de saneamientos, de 546 millones de euros en el conjunto del año, a fin de acelerar la reducción de activos improductivos y mejorar la rentabilidad estructural, "colocándonos en una buena posición de partida para alcanzar los objetivos anunciados para 2024, año de finalización de Plan Estratégico actual".
La junta general de accionistas han aprobado también la reelección de María Luisa Arjonilla como consejera independiente y el nombramiento de Víctor Covián como consejero dominical en representación de la Fundación Bancaria Caja de Ahorros de Asturias.