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El Ford Focus ST Edition no teme a los circuitos... ni a la calle

Aparte del motor de 280 CV, cuenta con frenos Brembo y una suspensión regulable al nivel de los coches de carreras. Además, viene a tope de equipamiento. La consecuencia: cuesta más de 51.000 euros

El Ford Focus ST Edition no teme a los circuitos... ni a la calle
Actualizado

Ya el primer Ford Focus de finales del siglo pasado era un coche unánimemente alabado por su comportamiento. Más las versiones ST y todavía un punto por encima las RS, hoy desaparecidas del catálogo. Bueno, tampoco se puede pedir mucho más después de ver lo que la marca ha hecho con el nuevo Focus ST Edition. Por resumir: un coche que lo mismo sirve para el día a día que para meterse en un circuito. Sí, eso que se dice de muchos superdeportivos con precios de seis dígitos, pero que se hace aquí realidad sobre un compacto de cinco puertas.

Con 280 CV y cambio manual

¿Y que es lo que permite hacer esa afirmación? No es mal comienzo recordar las cifras de rendimiento de su motor, un bloque gasolina de 2,3 litros de cilindrada, con turbo y 280 CV (es decir, una potencia específica por encima de los 100 CV/litro) que permiten catapultar al coche de 0 a 100 km/h en solo 5,7 segundos, con una velocidad máxima de 250 km/h. Aparte de contar con 420 Nm de par motor máximo disponibles a 3.000 rpm, lo que apunta a recuperaciones también fulgurantes. Va asociado exclusivamente a una caja de cambios manual de seis marchas, lo que agradecerán los más puristas y aprovecharan los más habilidosos al volante.

Suspensiones ajustables

Pero no. El valor añadido de esta versión son los ingredientes aportados desde Ford Performance, la división de altas prestaciones del fabricante norteamericano. Por encima del resto, las suspensiones ajustables. Probadas de forma exhaustiva a lo largo de toda Europa, dice el constructor, son 10 mm más bajas que en el Focus ST de serie, aunque el conductor dispondrá de un margen de ajuste adicional de otros 20 mm. La dureza de los muelles también se ha aumentado, hasta más de un 50%.... habrá que ver como lo asume la espalda.

Puesta punto para circuito

Las posibilidades de ajustes son casi infinitas, de modo que será cuestión de cogerle el truco y tener sensibilidad. El conductor puede elegir entre nada menos que 12 niveles en cuanto al rebote (el movimiento ascendente cuando cogemos un bache) y 16 para la recuperación (la velocidad a la que el amortiguador vuelve a su posición). Para ayudar, Ford entrega un documento técnico en el que se recomiendan diferentes ajustes para diferentes condiciones de conducción, incluyendo unos específicos para el famoso circuito alemán de Nürburgring, donde también se ensayó el coche.

Llantas y frenos

Otro equipamiento interesante son las llantas de aleación de 19 pulgadas, fabricadas mediante un proceso que se usa en la industria aeroespacial que permite aumentar su resistencia mientras se reduce la masa no suspendida en un 10%. Es decir, ayudan a cambios de dirección más rápido y potencian el rendimiento de los neumáticos P Zero Corsa. Por ultimo, como no se trata solo de correr mucho sino de frenar mejor, los delanteros los firma Brembo.

Equipado a tope

Y como las altas prestaciones no tienen por qué estar reñidas con usar el coche para llevar a los niños al colegio, o ir al trabajo, se han añadido al equipamiento de serie los paquetes de opciones más populares de la gama Focus ST. Eso supone contar con control de crucero adaptativo con reconocimiento de señales de velocidad y centrado de carril o sistema de información de ángulo muerto con alerta de tráfico cruzado; en el lado del confort, el sistema de sonido premium B&O cuenta con 675 W de potencia, 10 altavoces y un subwoofer; y, finalmente, el paquete de invierno incluye volante calefactado y un parabrisas Quickclear calefactado para que pueda desempañarse rápidamente cuando hay heladas.

Precio: más de 51.000 euros

De hecho, la dotación es completísima, sin ninguna opción posible ya que el coche se ofrece, sí o si, con un exclusivo color Azul Azura para la carrocería, mientras que las llantas, el techo, el alerón y el difusor traseros o los retrovisores exteriores vienen pintados en negro brillante. En el interior, los asientos, el volante, el pomo de la palanca de cambios, las protecciones de la consola central y las alfombrillas son de color Azul Motion.

¿El precio? No es barato, más bien un capricho: cuesta 51.042 euros, lo que supone 7.500 euros más que el ST convencional: La duda es si también merece la pena pagar unos 3.000 más que por el Cupra Leon VZ de 300 CV y 3.500 euros por encima del Hyundai i30 N con 280 CV.