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María Castro tuvo una cesárea velada y la cuenta de esta manera tan preciosa. ¿Sabes qué es?

24 Apr 2024
María Castro tuvo una cesárea velada

Dos semanas después de haber tenido a su tercera hija, Emma, la actriz María Castro explica, con todo lujo de detalles, cómo se produjo la cesárea velada a través de la que nació su pequeña. ¡Una cesárea velada es poco común y es un nacimiento espectacular! También te mostramos un vídeo de una cesárea velada, para que sepas cómo es.

María Castro dio a luz a Emma hace 15 días. Ahora, nos desvela un detalle precioso, que no debe pasarnos por alto: ¡Emma nació a través de una cesárea velada! En decir, cuando extrajeron a la pequeña todavía estaba dentro de su bolsa amniótica intacta. Una forma muy poco común de nacer, llena de calma, amabilidad y, por qué no decirlo, misticismo y magia. ¡Pero lo mejor de todo es cómo lo explica María en su post! ¡No dejes de leerlo porque es muy emotivo!

 
 
 
 
 
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"15 días de vida, Little EMMA!
Llegas con la CALMA propia de haber nacido velada (que esto no os lo había contado aún) y a la vez con toda la FUERZA de la naturaleza, capaz de cerrar un ciclo, el de mi maternidad (3 cesáreas son más que suficientes), y con ello sanar heridas… y todo ello mientras cumples sueños…Nuestro sueño de vida!

Vamos por partes. Entré a quirófano tranquila, serena… sabiendo los riesgos que asumía, y el tesoro que nos esperaba. Los que me conocen bien, saben que soy inquieta, pero no “nerviosa” para enfrentarme a las situaciones límite… y ahí tengo q decir que igual cuento con ventaja… porque siempre he pensado que mi tío Suso me vigila desde arriba, y sabrá tocar la tecla que corresponda, en caso de que algo se tuerza. GRACIAS una vez más, tío favorito del mundo mundial. No hay como creer.
Y eso que las terceras cesáreas… cuanto más las posteriores, no son de las operaciones favoritas de médicos y anestesistas. El útero debe contraerse, nada más “despegarte” al bebé de las entrañas…y cuantas más cicatrices tenga, puede que esa función se vea disminuida…y en ese caso poco más pueden hacer que esperar, y tener bolsas de transfusión por si… Por suerte allí se quedaron las mías, intactas, porque todo salió como se esperaba…Pero me doy cuenta que vuelvo a adelantarme, perdón.

Al despedirme de Jose (en este hospi las cesáreas son sin acompañante), lloré…¡obvio, sí! Pero de pura emoción…¡por conocedora de lo que iba a vivir una vez más!
Jose y yo nos hicimos la foto de rigor al despedirnos (él, yo, y las fotos de las neniñas), sabiendo que al salir todo sería diferente, pero igual de increíble que antes de entrar.

Me desinfectaron, me rociaron la espalda con algo muy frío y procedieron a pinchar la columna… ¿Que si duele? No lo sé. Yo solo podía pensar en ”frena las piernas María, que tiemblan como la paja, de forma incontrolada e involuntaria, y a ver si te mueves y la lías”

El anestesista empezó a cantar “Cruz de Navajas” (muy “salao”). Mi canción favorita donde las haya. Y supe que esa coincidencia solo podía traer en breve buenas noticias.

Automáticamente, las piernas se duermen, el temblor deja paso al frío del quirófano y…
Todo lo que pasaría a mi alrededor, desde este momento, carecía de importancia para mí…. Porque ya solo estaba ella. Así que me desconecté del mundo, para conectarme con Emma… mi tercer corazón, que a partir de ahora latirá cada vez más libre, mientras conquista a su vez otros corazones.

“Gracias, Emma, por elegirme…” alcancé a decir…. “Vamos a conocer a tu papá y tus hermanas… para que te digan eso de “bienvenida al mundo”, que ya es tradición en casa”.
 
Las máquinas empiezan a pitar. ¡Quien ha vivido una cesárea, sabe q se siente absolutamente TODO! No duele (eso ya tiene lugar después…desde que te levantas como si fueras Bambi recién nacida, incapaz de soportar tus piernas, hasta estremecerte en cada tos, risa, estornudo o coger a tu bebé… que te necesita 24/7 y más que nunca).

Percibes el olor de tu piel quemada, mientras se adentran capa tras capa en tu ser…. Percibes la tensión y concentración de todo el personal presente, que es mucho…. Sientes los tirones tratando de despegar una vida de la tuya propia…
Una vez más, y sin poder compartir esto con nadie cercano, me ayudó hablar con el anestesista de la simple y llana vida… hasta que la doctora dijo: “a ver, los que están de charla, que a Emma le quedan unos segundos…”.

Y dicho y hecho: las lágrimas previas al milagro empezar a bajar por mis mejillas, cuando oigo… “shhhhhh, shhhhh, silencio… que viene velada” (ya sabéis, cuando asoman la cabecita aún metidos en su bolsa y nadando en el líquido amniótico, sin darse cuenta de que “ha llegado el momento”). Los presentes no lo habían vivenciado nunca… y es que estos partos, que algunos consideran mágicos, se dan una de cada 80000 veces.

Yo quería ver… pero las manos atadas en cruz y la lona verde que me separaba de mi barriga, dificultaban la tarea, así q me conformé con escuchar… pero claro, una cesárea no es un parto vaginal…. Y tras tirar y tirar para “despegarla” de mí, la bolsa estalló. El “ohhhhhhh” rompió el silencio de la sala, y el llanto de Emma inundó mi corazón.

¡Y ahora ya, la velocidad! Matronas revisando que Emma estuviese bien, y yo sin perderla de vista, por supuesto. Mientras, pregunto por mi “útero” jajajjaja “¿Se contrae?”, me aventuro a decir. ¿Qué queréis? ¡Soy así!
Pero antes de que me puedan responder, me liberan una mano, acaricio al tercer amor de mi vida, y la succión allí mismo empieza… ¡lo que es el instinto!".
 

¡Qué maravillosa manera de describir el nacimiento de Emma, María! Este precioso escrito nos ha hecho vivir la cesárea velada de la actriz como si hubiésemos estado en el quirófano con ella. ¡Qué suerte tiene Emma de disfrutar de este texto en un futuro, para sentir lo que sintió su mamá cuando la vio nacer!

En muchas ocasiones, la cesárea se considera injustamente una forma "menor" o "fácil" de dar a luz. Incluso muchas personas no lo consideran parir. ¡Nada más lejos! Una cesárea es una forma de parir que implica mucha renuncia para una madre, pero que en ningún caso es menos que un parto vaginal. Dejemos que perpetuar tópicos y juicios sin sentido a las mamás por su forma de parir, que casi nunca es una elección propia, sino que viene determinada por las circunstancias.

(Te interesa: La imagen posparto de María Castro tras su tercera cesárea)

¿Qué es una cesárea o un parto velado? ¡Mira este vídeo espectacular!

Un parto velado es aquel en el cual el bebé nace con la bolsa amniótica íntegra, sin que llegue a romperse, protegido por lo tanto por las membranas y por el líquido amniótico. También se llama parto enmantillado, con toquilla, o con el manto de la virgen.

Se caracteriza por se extremadamente infrecuente (1 de cada 80.000 nacimientos) y por ser menos agresivo, tanto para el bebé como para la mamá. En el caso de la cesárea, también se puede producir de forma velada, y los beneficios para el bebé son los mismos que en un parto vaginal: venir al mundo menos presionado, de forma menos abrupta y más delicada. ¡Mira este vídeo increíble de una cesárea velada!

AMPLÍA LA INFORMACIÓN SOBRE EL PARTO VELADO AQUÍ

REDACTORA DE MI BEBÉ Y YO. Especializada en embarazo, maternidad y paternidad, bebés y niños, y coordinadora de nuestra Agenda del Embarazo.

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