ESPAÑA
Elecciones europeas

Crece el malestar en el PSOE por la lista de las europeas: perplejidad en Andalucía, "humillación" en Aragón y pugna entre dirigentes en León

El PSOE andaluz solo se garantiza un puesto de salida, frente a los dos escaños que tenía en un desaire manifiesto a Espadas

El ministro de Agricultura, Luis Planas, conversa con el líder del PSOE-A y portavoz en el Senado, Juan Espadas, en el pleno.
El ministro de Agricultura, Luis Planas, conversa con el líder del PSOE-A y portavoz en el Senado, Juan Espadas, en el pleno.ALBERTO DI LOLLI
Actualizado

Las listas para las elecciones europeas del 9 de junio, aprobadas apenas unos días después de las cinco jornadas de «reflexión» de Pedro Sánchez y la catarsis interna dentro del PSOE, ha provocado temblores de distinta intensidad en algunas de las más importantes federaciones del partido, aquéllas que, de forma evidente, han perdido peso en la papeleta con la que los socialistas concurrirán a las urnas en poco más de dos meses y ha avivado tensiones internas en otros territorios. Entre las primeras, destacan los casos de Andalucía y Aragón, mientras que la pugna es manifiesta en León.

Especialmente llamativo es el caso de Andalucía. Siendo la federación más importante del PSOE, con más de 44.000 militantes, solo ha conseguido incluir en los puestos de salida a una candidata, la ya eurodiputada Lina Gálvez, que ocupará el puesto número seis en la lista que encabeza la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera.

Aunque en el PSOE andaluz se muestran, de puertas para afuera, encantados con Gálvez, no es precisamente una apuesta personal del secretario general, Juan Espadas. De hecho, hay que descender hasta el puesto 24 para encontrar un nombre que pueda atribuirse sin dudas al líder andaluz, el de la alcaldesa de Montoro (Córdoba) y diputada Ana María Romero.

Su elección no está garantizada, dadas las expectativas electorales del PSOE (que ahora tiene 21 eurodiputados), como tampoco la del otro andaluz incluido -éste en el número 22-, Alejandro Moyano, que es el secretario general de las Juventudes Socialistas de Andalucía.

En este legislatura que ahora termina, el PSOE andaluz tenía dos escaños en el Parlamento europeo, la propia Gálvez y la granadina Clara Aguilera, que no repite.

El desaire es evidente si se tiene en cuenta que otras federaciones, como Cataluña, Madrid, Castilla La Mancha o Valencia sí se han asegurado dos puestos de salida en la lista.

Algunos sectores del PSOE-A, los más críticos con la línea oficial, subrayan que esta pérdida de peso del socialismo andaluz haya coincidido con la crisis provocada por el amago de dimisión de Sánchez y el comedido entusiasmo con el que respondió la dirección de Espadas en las movilizaciones de adhesión al presidente.

El PSOE andaluz se limitó, en un principio, a pedir apoyo al secretario general en las redes sociales, y sólo en la víspera animó a participar en la concentración en Ferraz. La ejecutiva del partido llegó a aclarar a EL MUNDO que no había intención de fletar autobuses de forma organizada y que se dejaba en manos de las agrupaciones locales y de la propia militancia buscarse los medios para llegar a Madrid.

Malestar interno en Castilla y León

La elaboración de la candidatura socialista a las elecciones europeas también ha generado malestar en el sector menos afín a Ferraz del PSOE en Castilla y León. Ibán García del Blanco, eurodiputado desde 2019, se ha quedado fuera pese a haber sido apoyado «de forma mayoritaria» por las asambleas del partido en su región al igual que Iratxe García, que sí repite como número dos de la candidatura.

El secretario general de los socialistas en León, Javier Alfonso Cendón, considerado como uno «principales apoyos» del secretario de Organización nacional, Santos Cerdán, se limitó a agradecer el trabajo de García del Blanco en estos cinco años, «que es muy significativo en ámbitos como la inteligencia artificial». «De nada. Seguro que no ha tenido tiempo de llamarme o enviarme un Whatsapp para decírmelo en persona», le respondía el aludido a través de su cuenta en la red X.

Más explícita a la hora de manifestar su rechazo a la maniobra de Ferraz de apartar a su compañero pese al respaldo territorial con el que contaba ha sido la diputada leonesa Andrea Fernández, que fue una de las personas excluidas de la Ejecutiva Federal del PSOE en la renovación del pasado mes de enero. A través de la misma red social, ha considerado que es «una decisión inexplicable en términos políticos». Por su parte, en el equipo del secretario general de los socialistas de Castilla y León, Luis Tudanca, que hace 10 días había mostrado su «gran respaldo» al trabajo realizado por García del Blanco «en una legislatura clave» y destacado el amplio apoyo de la militancia para que repitiera candidato, declinaron ayer hacer declaraciones.

El otro 'incendio' que ha generado la Comisión del Listas del PSOE ha sido la sustitución de la actual eurodiputada dentro de la cuota aragonesa del Parlamento Europeo, Isabel García Muñoz, cuya continuidad fue refrendada con el 90% del voto de las agrupaciones del partido en su comunidad de origen, por Rosa Serrano, en su caso afín a la actual ministra de Educación y portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, y, por añadidura, a la dirección nacional.

«Ferraz ha impuesto a una candidata con el 2% de apoyo. La militancia ha sido humillada. La explicación de Madrid aún es más indignante», ha denunciado Javier Lambán, el líder del partido en la región y uno de los barones más críticos con la gestión de Pedro Sánchez, además del único que no acudió al Comité Federal del PSOE del sábado pasado en apoyo del presidente del Gobierno alegando motivos de salud.